LAS PLAZAS DE ITUZAINGO CENTRO


Estas, situadas respectivamente al norte y sur de las vías del Ferrocarril Sarmiento; no tuvieron en su delineación primitiva, según se desprende del plano original de la traza del pueblo, las mismas superficies que en la actualidad. Ahora son simétricas, pero no lo fueron antes, pues a la del norte debió restársele una franja para dar correcta continuidad a la calle Zufriategui, quedando por lo tanto con las medidas que hoy presenta. A la del sur, en cambio, se le agregó algo de lo que era reserva del ferrocarril, ampliando su superficie sobre la ruta.
Las primeras plantaciones que se hicieron en la plaza 20 de Febrero son fruto de ricas y variadas especies de árboles nacidos de semillas intercambiadas por el teniente coronel César Cardoso, afincado en esos lugares ya en 1857, con amigos de Europa, cultores como él de la botánica.
Lo propio hizo al formar su quinta de la cual no queda hoy vestigio alguno, y otras más, donde conforme a tradición, siguen elevando sus copas ejemplares que preceden de simientes extranjeras, algunas venidas de París. Unidades de corpulentas tipas, frondosas encinas y elegantes coníferas tiene la plaza 20 de Febrero, con sectores apacibles y románticos. En su centro se halla un soberbio mástil; a pocos metros, el busto del general Manuel Belgrano; frente al templo parroquial el monumento a don Manuel Eustaquio Rodríguez Fragio y en el ángulo de las calles Mansilla y Soler un bronce que recuerda a José Montero Lacasa.
En la plaza General San Martín se levantan la columna erigida con motivo del ascenso de la localidad a la categoría de ciudad, un bronce al Libertador y una plataforma de reciente data, con mástiles. Otrora existió en el centro un basamento sobre el cual debía erigirse el monumento recordativo de la batalla de Ituzaingó, que nunca llegó a levantarse (ver página respectiva). Sin embargo la colocación de la piedra fundamental dio lugar a una solemne ceremonia, con la concurrencia de autoridades nacionales y provinciales.
Más tarde, la base sirvió como palco para la banda de música y también como tribuna política. En ambos paseos el Club de Leones y U.C.I.A.D.I. en colaboración, construyeron recientemente sendos parques de juegos infantiles que llevan los nombres de Constancio C. Vigil y Pablo Pizzurno.