EL ESCUDO DE ITUZAINGO


Representa en su centro el escudo de honor que el Congreso General Constituyente de las Provincias Unidas del Río de la Plata, por decreto del 16 de marzo de 1827 del presidente Rivadavia, acordó llevaran en el brazo izquierdo los valientes del Ejército de la República, en premio al distinguido mérito contraído en los campos de Ituzaingó sobre las tropas del Imperio del Brasil.
Lo ostentan los cuerpos de Artillería Liviana y de Caballería de Línea que tan destacada actuación tuvieran en el combate. Es de forma ovalada, filete punteado; en el campo, trofeos militares, rodeado el todo de laureles, bordado en hilo de metal dorado sobre paño gris claro para los oficiales superiores, jefes y oficiales, y en hilo de algodón, amarillo oro, sobre igual paño, para suboficiales y soldados. En su derredor se lee: La República a los vencedores de Ituzaingó – 20/2/1827.
El grupo de Artillería 1 de Campaña Motorizada Brigadier General Iriarte es la unidad decana del arma, fundada el 9 de marzo de 1826 por un decreto del presidente Rivadavia, refrendado po0r el general Carlos María de Alvear. Fue puesto al mando del teniente coronel Tomás de Iriarte, en homenaje del cual, más tarde se bautizó al regimiento, y se organizó con una plana mayor y dos escuadrones, cada uno de ellos de dos compañías. Su bandera ondeó en los campos de batalla contra el Imperio del Brasil, en las guerras de la Organización Nacional, en la guerra contra el Paraguay, y en las campañas del Desierto. Tiene su asiento en los cuarteles de Liniers, inaugurados en 1902, y cuyo estilo arquitectónico dio el nombre a la localidad de Ciudadela.
A los dos meses de su creación el regimiento debió hacerse presente en el teatro de operaciones de la guerra con el Brasil, y antes del año recibía su bautismo de fuego en la batalla de Ituzaingó, mereciendo los elogios del comandante en jefe del Ejército. La imposición al regimiento del escudo de Ituzaingó, se efectuó en los cuarteles de Ciudadela el 9 de mayo de 1960.
La dirección de “Noticiero Ituzaingó” el 31 de mayo de 1964 llama a concurso para la creación del escudo de Ituzaingó, actuando un jurado de tres miembros de reconocida autoridad en la materia para la adjudicación de los premios y menciones. Lo integraron los señores Jorge de Zarazaga Berenger, presidente de la Junta de Genealogía y Heráldica de Buenos Aires, Hugo Fernández Burzaco, vicepresidente 2º del Instituto Argentino de Ciencias Genealógicas y el heraldista Julián de Alós de Amilibia.
El jurado analizó las obras presentadas solamente desde el punto de vista heráldico y, en consecuencia, adjudicó los premios a personas vinculadas a la institución por cuanto sus trabajos respondían a los preceptos de ese saber, pero carentes de una expresión representativa del lugar o del nombre de Ituzaingó.
La Dirección del periódico respetó la opinión de los árbitros, estimando empero que debía ser blasón de la ciudad un emblema de mayor significación propia, que concitara al hallazgo de algo nuestro o del suceso histórico que le da nombre a la ciudad. Una selección de bocetos fue presentada entonces a la Comisión de Festejos; entre ellos había uno que, a pesar de no ser una creación, reproducía el distintivo que el Gobierno de las Provincias Unidas del Río de la Plata otorgara en 1827 a los vencedores de la batalla de Ituzaingó, es decir a los efectivos de los regimientos 1 de Artillería Motorizado Brigadier General Tomás de Iriarte y 8 de Tanques de Caballería Blindada Cazadores General Necochea, cuyas denominaciones son las actuales de los cuerpos citados al inicio del capítulo.
La Comisión de Festejos, en su reunión del 23 de julio de 1965, estudió los antecedentes y como al descripto emblema recuerda el hecho sobresaliente de armas para nuestra historia patria, optó por aceptar dicho símbolo como escudo de Ituzaingó.
Fue presentado oficialmente el 24 de octubre de ese año, en la Cena de las Instituciones, servida en los salones del Club Gimnasia y Esgrima local en ocasión de celebrarse la exaltación de la localidad a la categoría de ciudad. La entrega de los premios a los ganadores del concurso, Martha S. Bellusci – José M. Simonetti, Felipe D. Darmandral y Carlos J. M. Gowland Acosta – Carlos H. Canzonieri, según lo dispuso el jurado, se realizó en la oportunidad sin la presencia de éstos. Los respectivos cheques fueron puestos en manos del presidente de la Comisión de Festejos, señor Jorge H. Cebey, quien los hizo llegar a los galardonados.
La señorita Laura Luisa Camerucci, mi hija, fue quien expuso el calco del escudo de Ituzaingó, que, sin ser emblema heráldico –según manifestara el señor Zarazaga Berenger- sin embargo fue adoptado para la ciudad. Cabe poner en claro que ningún miembro de la Comisión de Festejos que revió los dibujos, en momento alguno fue informado que la copia del distintivo había sido presentada por la señorita Camerucci, circunstancia que sólo más tarde se reveló al presidente y al secretario de esa comisión.